Menu CULIBLANCO por FRANCISCO NIETO

lunes, 8 de agosto de 2011

Santuario de La Gleva de Les Masies de Voltregà, Barcelona. 06-08-2011

Santuario de La Gleva de Les Masies de Voltregà

Imagen Francisco Nieto (pinchar en imágen para ver mejor) 
Información web de Les Masies de Voltrega.
La tradición popular nos habla de que una pastorcilla de la masía Codines encontró la imagen de la Virgen, mientras pastora ganado el Puig del Terrer y vio como uno de los toros empezaba a 



bramar ya hurgar con el hocico en un punto determinado sin querer moverse . Allí encontraron dentro de un agujero la imagen de la Virgen protegida por dos columnas de terracota que aguantaban una gleba de tapas que le servía de techo. El hecho de encontrar la imagen bajo una gleba fue lo que le dio el nombre. 
Llevada a San Hipólito, allí fue depositada en el templo parroquial, de donde dice la tradición que desapareció milagrosamente para volver al lugar donde fue encontrada. 
Esto fue interpretado como la voluntad de la Virgen de permanecer en el monte del Terrer. Por esta razón en 1280 se decidió construir un oratorio en ese punto exacto. 
En 1327, se empezaron las obras del que acabaría siendo un gran Santuario. 

CONSTRUCCIÓN DEL TEMPLO 
El nuevo Santuario contaba con un presbiterio bajo el cual se encontraba "la cueva" que coincidía con el lugar donde había sido encontrada la Santa imagen. 
Un retablo en 1480 obra de Fernando Soler Verneda y el "Jamba" pintado en 1507 por Gurrea y Mesoneda añadieron un gran valor artístico. 
En 1683 el escultor Pau Sunyer y el tallista Francisco Farriols de Manresa, hicieron un nuevo retablo de estilo plateresco. 
La prosperidad y magnificencia quedaron repentinamente cortadas cuando en 1759 un rayo destruyó gran parte del Santuario. En 1766 se empezaron las obras de reconstrucción a cargo del arquitecto Vic Josep Morató Selles, que añadió la rectoría hospedería y dotó al templo de un riqueza ornamental. 

La devoción hacia Santa María de la Gleva enseguida fue muy extendida en la comarca. Se encuentran una serie de legados y dejas en su favor, pero uno de los símbolos de la devoción popular fueron las grandes procesiones que desde Vic y otros pueblos de la comarca se hacían, como la del 1337 con motivo de una fuerte sequía que asolaba la comarca y que llegó a dejar seco el Ter. Al llegar a La Gleva, el obispo Galcerán Sacosta bajó la imagen de la Virgen hasta el río donde mojar los pies con el agua que quedaba, haciendo oraciones para que lloviera. Al cabo de tres días llovió intensamente, lo que la devoción popular atribuyó a la intervención milagrosa de la Virgen. 
El santuario proviene de un primer oratorio, una simple iglesia que seguramente con varias reformas duró hasta el 1327, fecha en que comenzaron las obras de un santuario (parece que duraron casi un siglo). Sabemos que era de una sola nave y que fue ampliado en 1671. 
Debajo del prebiteri estaba la capilla honda o cripta, llamada popularmente la cueva, que coincidía con el lugar donde la tradición dice que fue encontrada la Santa imagen. Tenía también un retablo del 1480, obra de Fernando Soler Verneda, y en 1507 los pintores Gurrea y Mesoneda fueron pintar Jamba. 
En 1683 el escultor Pau Sunyer y el tallista Francisco Farriols, de Manresa vende hacer un nuevo retablo que estaba en el aspecto artístico, una valiosa pieza en la evolución de los grandes retablos platerescos. En 1759 un rayo destruyó el campanario, el presviteri, gran parte del templo hospedería, que quedaron casi inservibles. 
En 1766 se empiezan las obras de un nuevo santuario para reconstruir los destrozos.


No hay comentarios: